Nafta y Fuego - Taller

Cómo saber si hicimos bien los cálculos y definimos metas inalcanzables? Cuando definimos los indicadores de nuestros talleres también nos pusimos metas, objetivos, plazos, cantidades, etc. Muchas veces creemos que podemos hacer determinada cantidad de trabajo y nos comprometemos ante los clientes, los proveedores o ante nosotros mismos.  A esta altura ya conocemos el concepto de indicadores, cabe destacar que todos ellos están en un equilibrio que permite hacer que nuestro taller funcione, gane dinero y sea un buen lugar para trabajar. Por ejemplo, es probable que existan relaciones entre algunos indicadores como por ejemplo los de productividad con los de capacitación, no pasaría lo mismo con el indicador de dotación. O sea no es necesario para aumentar la producción del taller tener más cantidad de gente trabajando, sino gente mas capacitada y ordenada logrando eficiencia mas que eficacia....

Qué hacemos para saber que lo producido se ajusta a lo que proyectamos, como actuar ante un desvío cuando el producto que salió de nuestros talleres no se ajusta lo que el cliente necesita o tenemos muchos reclamos? Si observamos el  circulo de la virtuosidad de Deming aquel del que venimos hablando nos encontramos que luego de medir, de armar nuestros tableros de comando, llega el momento de Actuar . Uno de los indicadores claves de nuestro taller debería ser el correspondiente a reclamos, debe ser un objetivo para nosotros disminuir es indicador, dado que prácticamente es imposible reducirlo a cero. Es por esto que al momento de redactar los objetivos de mejora deberemos comenzar con un verbo como por ejemplo: disminuir, aumentar, reducir, acrecentar, etc. En un taller que se gestiona correctamente al encontrarnos con un error lo que se debe hacer es buscar la solución, jamas empezar por buscar al culpable. Recuerde...

Como formar un líder Muchas veces nos pasa que nuestros talleres crecen y se nos van de las manos, pasa que debemos agrandar la dotación e incluso nombrar un capataz, alguien que nos ayude mientras nosotros nos dedicamos a tareas de alta responsabilidad que no podemos delegar, como por ejemplo, compras, clientes, proveedores etc. En esos casos es posible que debamos corrernos de la tarea puramente de taller y tomar una función mas de dirección. Es en ese momento que podremos delegar la responsabilidad de bregar por el cumplimento de los objetivos en un compañero que por sus capacidades como operario entendemos podría ayudarnos. Suponemos esta a la altura de la responsabilidad. Ahora bien, es importante que sepamos que ser un excelente oficial no te hace ser un excelente líder (capataz por ejemplo).  Es por eso que un ascenso siempre debe ser a prueba fijándole a la persona que designemos un objetivo par...